Silvia Plath decia que hay algo en el mar que hace que el alma se sienta más libre.
Y es que el mar es una orilla, un puerto pero es también desde donde parte el viaje ya sea físico o mental.
El mar nos llama. A los antiguos les interpelelía a salir, a viajar, a moverse.
A nosotros nos sigue fascinando y nos quedamos fascinados e hipnotizados con su baile y su movimiento mirándolo desde la orilla y sumergiéndonos en su sonido. Nos hace movernos. Nos clarifica.
Estas imágenes son una exploración de la esencia de lo que nos mueve. Un investigación de esas formas puras, simples, primigenias, de lo que se está formando y de ese viaje mental, desde la luz y la claridad que nos proporciona la búsqueda de nuestro propio origen.




